Frente a la renovación hoy del mandato de la Misión de la ONU para la Estabilización de Haití (MINUSTAH), el Premio Nobel de la Paz argentino, Adolfo Pérez Esquivel, expresó su indignación ante una decisión que no toma en cuenta la urgencia de una profunda transformación de la política internacional hacia Haití. “Esto prolonga una ocupación militar y económica que atenta contra la soberanía y autodeterminación del pueblo de ese país, usurpa recursos que necesitan para su bienestar y que además ha acumulado un gravísimo record de asesinatos, violaciones y otros atropellos a los derechos humanos”, señaló Pérez Esquivel. “Decisiones como esta profundizan además el desprestigio y pérdida de legitimidad del propio Consejo de Seguridad, que sigue planteando que Haití es el problema en vez de reconocer que es el pueblo haitiano que tiene la capacidad y el derecho de construir su propio país y futuro.”
Beverly Keene, integrante de Diálogo 2000 Argentina y coordinadora internacional de la red Jubileo Sur, ratificó la demanda a los gobiernos de América Latina en especial, y de todo el Sur, a que se retiren inmediatamente las tropas que actualmente constituyen casi la totalidad de las fuerzas de la Misión. “Respaldamos los reclamos de nuestras organizaciones aliadas en Haití, que rechazan la presencia de estas tropas de ocupación y demandan que la ONU, en vez de llevarles nuevos problemas como las violaciones, asesinatos y la epidemia de cólera que hasta la fecha ha provocado más de 6000 muertes, proceda a aplicar sanciones ejemplares y ofrecer compensación a las víctimas.”
“Tenemos un ‘deber de gratitud’ hacia Haití, como dijo Eduardo Galeano en su visita reciente en Buenos Aires,” comentó Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora. “Ha sido el primer pueblo del mundo en quitarse de encima el doble yugo de la esclavitud y del colonialismo — y ahora, no es posible que se siga pisoteando el pueblo como se está haciendo. Hay que apoyarles en la lucha contra la impunidad, en recuperar lo que les ha sido quitado, en lograr que no se le endeuden más y que se le restaure la deuda histórica, la deuda social, la deuda ecológica.”
Desde Sao Paulo, la secretaria de la Red Jubileo Sur Brazil, Rosilene Wansetto, reforzó el compromiso de seguir profundizando la campaña “Haiti NO Minustah”, señalando que pronto habrá un gran Acto Continental para el retiro de las tropas en esa ciudad, una audiencia con el Ministro de Defensa brasileño y, para febrero de 2012, una II Misión Internacional de Solidaridad e Investigación a Haití. “No es suficiente que se reduzca el nivel de tropas a lo que había antes del terremoto – expresó Wansetto -. Las tropas siguen siendo una fuerza de ocupación, siguen entrenándose en Haití para volver a las favelas y villas miseria de nuestros países para reprimir y controlar a la población, y esto es inaceptable. Tenemos que redoblar nuestros esfuerzos para lograr una verdadera cooperación solidaria con el pueblo de Haití, como la que desde hace años realiza Cuba, o Venezuela, lo que hoy está haciendo el MST. Es posible.”
Pérez Esquivel, las Premios Nobel de la Paz Mairead Corrigan Maguire y Betty Williams, las Madres de la Plaza de Mayo-Línea Fundadora Nora Cortiñas y Mirta Baravalle, el escritor Eduardo Galeano, el músico Víctor Heredia, los teólogos Leonardo Boff, Frei Betto y Ofelia Ortega, presidenta para América latina del Consejo Mundial de Iglesias, entre otros destacados militantes de la vida, la paz y los derechos humanos, académicos, líderes comunitarios, y centenares de organizaciones de 45 países y todas las regiones del mundo, incluyendo a la red Jubileo Sur y el Servicio Paz y Justicia en América Latina, se dirigieron recientemente en una Carta abierta a los Secretarios Generales de la ONU y la OEA, los miembros del Consejo de Seguridad y de la MINUSTAH y a la comunidad internacional en su conjunto, reclamando el fin de la MINUSTAH y la adopción de un nuevo paradigma de cooperación con Haití. La Carta fue entregada en el marco de la Semana de Acción contra la Deuda y las IFIs (8 al 16 de octubre), en reconocimiento además de la necesidad de lograr la anulación total e incondicional de las deudas que aún se cobran a ese país y la reparación de las deudas históricas, financieras, ecológicas y sociales adeudadas al pueblo haitiano.
Carta completa a la ONU, OEA, con las adhesiones hasta el momento entrar acá
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